
La Archidiócesis Mérida-Badajoz suspende los desfiles procesionales de la Semana Santa e implementa otras medidas seguiendo las directrices de las autoridades en cuanto a la alerta sanitaria del coronavirus.
La decisión ha sido adoptada tras consultar al Consejo Diocesano de Hermandades y Cofradías y a las autoridades civiles de la Comunidad Autónoma.
Ante la nueva situación con motivo de la propagación del coronavirus, además, la archidiócesis cierra además las oficinas del Arzobispado y de la Casa de la Iglesia hasta el día 26 de marzo.
Seguirá operativo el teléfono del Arzobispado (924222847), así como el de Cancillería (670097306), y los empleados continuarán trabajando desde sus casas.
Asimismo, ante la suspensión de las clases y el cierre de los centros educativos, decretada ayer por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta, se suspenden las catequesis presenciales hasta después de Semana Santa.
De este modo, la archidiócesis pide a sacerdotes y catequistas que continúen y hagan seguimiento de la formación de los catecúmenos a través de los medios que estimen oportunos, como teléfono, WhatsApp, correo electrónico, etcétera.
También se cancelan todas las celebraciones comunitarias de la penitencia, reuniones parroquiales y arciprestales hasta después de Semana Santa.
Además, todos los fieles cristianos de la Archidiócesis de Mérida-Badajoz están «dispensados» del precepto de participar en la Eucaristía dominical, «dejando a su conciencia cristiana acudir o no a la misma».
Al respecto, apunta que la «comunión espiritual» es una práctica tradicional de la Iglesia que se ha de recuperar en estas «dolorosas circunstancias»; y recuerda que además los medios de comunicación permiten seguir la santa Misa por televisión, radio o internet.
De igual manera, y aunque sea con un número «muy limitado» de fieles, o «incluso sin ellos», la archidiócesis plantea que los sacerdotes procuren celebrar diariamente la Eucaristía, ofreciéndola por los difuntos y enfermos y poniendo como intención la superación de esta pandemia.
En cualquier caso, incide en que la limitación de no ocupar más de un tercio del aforo de las parroquias, iglesias y oratorios es de obligado cumplimiento, de tal forma que por tanto las bodas y funerales se realizarán «exclusivamente con los más allegados».
Asimismo, recuerda que el Arzobispo permite a todos los sacerdotes que puedan celebrar los días feriales de Cuaresma alguna de las Misas ante cualquier necesidad (Misal Romano n. 48 B o C).
La Archidiócesis de Mérida-Badajoz apela a la responsabilidad de cada uno y pide que se tenga en cuenta tanto las recomendaciones que se han realizado desde este Arzobispado como las indicaciones de la autoridad civil.