Televisión Extremeña
Un año más, el santísimo Cristo de la O -talla del siglo XIV- volvió a procesionar desde la Concatedral Metropolitana de Santa María la Mayor hasta el Anfiteatro Romano para celebrar el Vía Crucis de la Semana Santa de Mérida organizado por la Junta Arciprestal de Cofradías y Hermandades.
El solemne traslado se realizó a la una y media de la madrugada de este Sábado Santo, acompañado por penitentes que portaban un farol de mano y una escolta de la Legio V. La estación de penitencia transcurrió en silencio, solo roto por el redoble de tambores sordos.
Una vez llegó al monumento romano, se desarrolló el Vía Crucis con cantos de la Liturgia Hispano-Visigótica a cargo de la Capilla Gregoriana del Stmo. Cristo del Calvario.
Después, la imagen más antigua de la capital extremeña regresó a su templo.