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El Grupo Municipal Unidas por Mérida considera que la intervención realizada en el descendedero del Puente Romano supone una «agresión al patrimonio histórico», ya que a su juicio incumple «el deber de conservación y mantenimiento del patrimonio histórico de la ciudad».
Según señala este grupo en nota de prensa, la obra realizada en el descendedero del Puente Romano «incumple elementos sustanciales que regulan las intervenciones de esta naturaleza», tanto en términos estéticos, como sobre el cuidado y conservación de los valores que se incorporan al monumento, entendido en su conjunto.
Para Unidas por Mérida, la obra realizada «supone una falsificación de la realidad histórica del monumento», hasta el punto en el que esta actuación «parece más propia de un aparcamiento que de uno de monumentos romanos mejor conservados y más importantes del mundo».
En ese sentido, añade que plantear una obra en un monumento del siglo I, con el propósito de mejorar su accesibilidad, sobre un elemento «que por su propia pendiente, características físicas y funcionales, resulta incompatible con la normativa de accesibilidad», es «absurdo hasta el punto en el que el resultado no permite garantizar las condiciones legales de accesibilidad debido a la propia morfología del puente», apunta esta formación.
«No podemos obviar que el proyecto inicial fue modificado en plena ejecución, lo que pone de relieve las dudas de los propios gestores del proyecto», que finalmente han obtenido un resultado «lamentable», que a juicio de Unidas por Mérida «viene a reafirmar los recelos que tradicionalmente nos han suscitado las decisiones del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, así como el apoyo que han recibido por parte de los diferentes alcaldes que ha tenido esta ciudad».
A su juicio, cualquier intervención en un monumento integrante del patrimonio histórico «debe tener como propósito la conservación de los valores del monumento», por lo que consideran que la actuación llevada a cabo «tiene como consecuencia la imposibilidad de reconocer los descendederos como elementos originales del Puente Romano», debido la «agresión realizada en los valores estéticos que dificulta la correcta comprensión y autenticidad del monumento, y conlleva un flaco favor sobre el legado que debemos respetar para las generaciones futuras», concluye.